El umbral de la Revelación personal


Como le fue revelado a
Marshall Vian Summers
el 21 de julio de 2009
en Alepo, Siria

Texto original: The Threshold of Personal Revelation (no disponible online)

Escucha el audio original aquí (en inglés): no disponible online

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Lo que estás leyendo en este texto es la transcripción de la voz original de la Asamblea Angélica hablando a través del Mensajero Marshall Vian Summers.

Aquí, la comunicación original de Dios, que existe más allá de las palabras, es traducida al lenguaje y el entendimiento humanos por la Asamblea Angélica que supervisa el mundo. La Asamblea después entrega el Mensaje de Dios a través del Mensajero, tras lo cual es transcrito y puesto a tu disposición y a disposición de todos.

En este extraordinario proceso, la Voz de la Revelación está hablando de nuevo. La Palabra y el Sonido están en el mundo. Que puedas ser el receptor de este regalo de Revelación y puedas estar abierto a recibir su Mensaje único para ti y para tu vida.




Nota a los lectores:
Esta traducción fue provista a la
Society por estudiantes del Nuevo Mensaje que se han ofrecido voluntariamente a traducir el texto original en inglés. La publicamos en esta forma inicial para que todo el mundo tenga una oportunidad de interactuar con una porción del Nuevo Mensaje en un su propio idioma.

Es importante comprender que, en cualquier momento determinado en el mundo, ciertas personas son llamadas. Esta llamada viene tanto desde su interior como desde el exterior. Es una llamada que resuena en el mundo y dentro de su ser interior. Pero es una llamada que solo ellos pueden sentir y quizás algunos otros que están ahí para ayudarlos o apoyarlos en su propia Revelación personal.

Las personas piensan sobre la Revelación en términos del mundo entero o de una nación de personas, pero realmente debe haber una revelación personal, y esta revelación es el resultado de muchos pasos y muchas etapas. No es algo que puedas controlar. No puedes forzarte a tener esta revelación, ya que implica el contacto con los Poderes Espirituales a tu alrededor y con la Voluntad del Creador.

Por tanto, no puedes hacer que se produzca esta revelación mediante una ardua práctica espiritual o por medio de una intensa afirmación personal. Si tu práctica espiritual es eficaz, sin embargo, apresurará y agilizará el momento en que esta revelación vendrá. Pero el día y la hora siguen estando más allá de ti. No es algo que puedas controlar. No es tu creación personal. Es parte de la propia Creación.

Todos en el mundo han sido enviados aquí por un propósito, para servir en una forma y capacidad únicas. Todo el mundo tiene la oportunidad de experimentar una revelación personal, aunque muchos nunca alcanzarán este punto en su desarrollo.

Pero en este momento, ciertas personas están siendo llamadas. Ellas son las elegidas. Ellas son las que han dado suficientes pasos en la vida para acercarse a una revelación personal. Sus propios éxitos y fracasos, sus propias decepciones y desilusiones y su propio enfoque pueden llevarles hacia este gran umbral dentro de sí mismas.

Las personas elegidas deben responder. Han llegado lo suficientemente lejos ahora y la Revelación está sonando para ellas. La sentirán en su interior, y la llamada vendrá desde fuera. La hora y el lugar son importantes. Las interacciones con los individuos  que son significativos son aquí muy importantes. Es como si la hora y el momento hubieran sido preparados durante mucho tiempo bajo circunstancias muy tenues. La llamada está sonando.

Como ves, si sientes esta llamada es porque ha llegado tu hora. Es la hora de que tu revelación personal comience. Tal vez te sientas preparado. Tal vez no. Tal vez le des la bienvenida. Tal vez te asuste. Tal vez puedas aceptarla. Tal vez no puedas. Pero el momento ha llegado para tu revelación.

En tu corazón sabes que esto es cierto. A un nivel más profundo dentro de ti —al nivel del Conocimiento, la mente más profunda— todo esto se sabe y ha sido anticipado. Has llegado a un umbral importante, y ahora debes cruzarlo.

Vives en un mundo caótico, ajetreado, lleno de tensión y ruido, rodeado por personas que están tristes y agravadas, decepcionadas y desanimadas. Rico o pobre, estás enfrentando un mundo que no reconoce el significado de esta revelación y que no confirmará la experiencia más profunda que estás teniendo. Porque solo existen ciertos individuos que puedan hacer eso por ti.

Si no has alcanzado este punto de revelación, entonces es importante que tomes los Pasos al Conocimiento para preparar tu mente, simplificar tu vida y reevaluar tus relaciones, tus actividades, tus compromisos y tus obligaciones.

Porque la revelación no llega por accidente. Y si la hora y el momento se aproximan y no estás preparado, la activación no ocurrirá y sentirás una tremenda confusión y decepción.

Tu revelación está coordinada con eventos en el mundo, con el desarrollo de otros y con las necesidades de la familia humana. Esto ocurre más allá del ámbito de tu compresión. No puedes ni siquiera imaginarlo. Es por eso que la preparación es tan esencial, como ves.

Porque si tu hora llega y no estás listo, habrás perdido el momento más importante de tu vida, la mayor oportunidad de tu vida, el mayor punto de inflexión de tu vida. Este momento vendrá, vivirá contigo y después se irá. Y puede que no vuelva en mucho tiempo.

Cuando se establecen todas las condiciones para tu revelación, cuando están activados aquellos que están ahí para apoyarte, la oportunidad para que tu contribución única se haga está lista, a la vista y puede discernirse. Más allá de este momento de reconocimiento, todas estas cosas se desvanecen, pierden enfoque y no podrás recuperarlas hasta un cierto punto futuro en el que las condiciones se alineen de nuevo y la llamada pueda sonar otra vez para ti. Pero esto puede estar a años y décadas de distancia, y si eres mayor puede no venir de nuevo para ti.

Muchas personas han dejado atrás uno o dos umbrales del despertar. Todo lo que pueden hacer ahora para afirmar el poder del Espíritu y su mayor propósito es contribuir, compartir sus recursos —su riqueza, su tiempo y su energía— para apoyar el surgimiento del Conocimiento en otros.

Las personas no se dan cuenta de lo preciosos que son estos momentos. Asumen que la posibilidad siempre estará ahí, siempre esperándolas, siempre a su disposición. Así que se toman su tiempo. Ellas son descuidadas. Su práctica espiritual, si la tienen, es mediocre e intermitente. No ven que han sido seleccionadas y que está llegando el momento de su revelación. Porque se imaginan que ese momento siempre está disponible. No comprenden que vendrá, pasará y puede que nunca surja de nuevo en esta vida.

Las personas piensan así porque están funcionando desde una posición de Separación, en la que piensan que todas las cosas son sobre ellas. No comprenden que su revelación es una coordinación con otras mentes, con grandes eventos y con el Poder Espiritual en el universo. No comprenden el grado en el que ellas mismas deben prepararse y como el tiempo, el lugar y las personas con las que están asociadas tienen una importancia crítica.

Si estás en el lugar equivocado y con las personas equivocadas, puede que no se produzca la transición de poder. La revelación es una transferencia de poder, desde lo Divino [al mundo] a través del individuo, en forma de una contribución al mundo que estás diseñado para hacer en un determinado momento y lugar con ciertas personas.

Es por eso que este proceso es tan misterioso, como ves. No puedes calcularlo. No puedes trazar una ruta. No puedes decir el momento o el tiempo, porque no conoces todas las facetas involucradas en esta transferencia de poder.

Algunas personas creen que la revelación forma parte de un esfuerzo espiritual intenso, y que esto por sí solo será suficiente. Pero no es así, como ves.

Puedes esforzarte para prepararte adecuadamente, pero eso es solo parte de la ecuación. Las circunstancias deben ser correctas. El lugar debe ser correcto. Tu posición en tu vida debe ser correcta. Debes estar listo para romper con tu existencia anterior en un grado muy alto. Debes estar preparado para renunciar a tu antigua idea de ti mismo, a tu autocondena, a tus ideas autolimitantes y a muchas de tus asociaciones personales, de lo contrario no podrás avanzar a través de la revelación.

La revelación no es solo un momento de despertar. Es una transferencia completa de poder y autoridad dentro de ti desde tu mente, la mente superficial con la que piensas y que está condicionada y controlada por el mundo, a una mente más profunda dentro de ti que está libre de estas restricciones. Pero no es solo un proceso interno. Es la reorientación de tu vida, un reenfoque de tus capacidades y un desvanecimiento de las antiguas ideas y lealtades para entrar en todo un nuevo territorio y fase de la vida.

Es como si nacieras de nuevo. Aunque podría ser que ciertas alianzas claves atravesaran esta fase contigo, tu experiencia de ellas cambiará. Ahora estás siendo gobernado por un poder y una fuerza mayores, no solo por tu voluntad personal, tus temores y tus ambiciones y por tu condicionamiento social y las opiniones de los demás. Aunque todavía solo de manera intermitente, estás siendo guiado principalmente por un poder mayor dentro de ti, porque la revelación debe continuar desde este punto en adelante.

Aquí tus ideas y creencias sobre la espiritualidad, Dios y la vida solo son secundarias al significado de tu práctica y dedicación espirituales. Aquí lo más importante es lo que haces, no lo que piensas. Porque lo que tienes la voluntad de hacer representa lo que realmente piensas, lo que realmente te motiva y lo que estás tratando de encontrar.

En este momento ciertas personas son elegidas. No importa que nadie más esté siendo elegido. Importa si estas personas están siendo elegidas, si tú estás siendo elegido. No te preocupes por tu amigo, tu cónyuge, tus hijos o tus padres. Eres quien debe responder. Es tu relación con Dios la que está siendo activada.

Aquí debes despejar el camino. Debes preparar un lugar dentro de ti para que la revelación ocurra y continúe ocurriendo. Debes traer tu práctica espiritual a la vanguardia de tu vida. Debes conseguir que tu relación con el Conocimiento, la mente más profunda que Dios ha creado en tu interior, sea tu guía y consuelo principal, tu responsabilidad principal y tu asociación primaria.

Seguirás teniendo relaciones con otros, pero el énfasis dentro de ti cambiará drásticamente. Este cambio ocurrirá en varias fases cuando la Revelación haya comenzado. No ocurrirá todo de una vez.

Muchas personas fallarán en el proceso de revelación. Se asustarán y retrocederán. Tratarán de huir, cuando en realidad solo están huyendo de sí mismas y de la verdad sobre sus vidas. Están huyendo de Dios, ¿y cómo puedes huir de Dios, salvo sumergiéndote en obsesiones y adicciones? Hay personas adictas a sustancias que entraron en esa fase porque fallaron un paso en el proceso de su revelación.

Una vez que comienza la revelación, no hay garantía de que el individuo la complete con éxito y atraviese sus muchas etapas. El giro de una vida hacia Dios no es repentino e inmediato. Es gradual. Pero una vez que comienza debe completarse, o la persona quedará devastada en el fracaso y la confusión. Por tanto, esto no debe considerarse o tomarse a la ligera.

Si eres elegido, eres elegido por Dios para pasar por este proceso de revelación, que es una forma avanzada de preparación. Tienes que atravesar la incertidumbre, porque no entenderás lo que está sucediendo en tu vida. Tus ideas y creencias no pueden explicarlo. Es como si estuvieras atravesando un largo túnel o pasaje, emergiendo a un mundo diferente, a una conciencia diferente, a una experiencia más profunda que trasciende y sobrepasa tus experiencias anteriores. Has comenzado un proceso que debes completar, porque el fracaso aquí producirá una forma de sufrimiento que nada puede disipar.

Aquí es donde tu compromiso debe hacerse real y poderoso, sin que nadie ni ningún lugar o cosa lo comprometan. Es como si estuvieras pasando sobre un gran puente, un puente colgante sobre un gran abismo, y debes llegar hasta el final. Pese a que parece desvencijado e inestable, el puente te llevará si continúas. Pero no puedes mirar hacia atrás. Y no puedes mirar hacia abajo. Debes continuar. Esto es esencial.

El fracaso aquí puede ocurrir en muchas etapas diferentes. Puede que no logres prepararte para tu revelación. Puede que no logres experimentar tu revelación. Y puede que no logres cumplir tu revelación, lo cual supone no contribuir los regalos que emergerán naturalmente y que siempre han estado ahí para ti. El fracaso es siempre una retirada hacia la fantasía, hacia el romance, hacia la obsesión, un retorno a un estado de separación, un retorno hacia el pasado o a tu imaginación del pasado.

La persona equivocada, el compromiso incorrecto, una obsesión… cualquiera de estas cosas puede sacarte del camino mientras experimentas este delicado y preciso proceso de revelación.

Puede que te preguntes: “¿Estoy ya en este proceso de revelación?” Esto es importante, pero no debes asumir que lo estás. Si has llegado a un punto donde no puedes volver a tu vida anterior, donde no puedes volver a tus relaciones anteriores, donde no puedes volver a tu anterior forma de vivir, de pensar y de relacionarte con otros, y este reconocimiento es completo, y sientes un poder instándote a avanzar hacia lo desconocido, hacia un nuevo territorio, entonces es probable que hayas iniciado el proceso de revelación.

Lo único que sabrás a ciencia cierta es que el poder del Conocimiento dentro de ti está instándote a avanzar, porque los umbrales son invisibles. Pasas por ellos y después tu experiencia comienza a cambiar a un nivel fundamental. Puede haber grandes momentos de iluminación, pero estos en sí mismos son señales de que has doblado una esquina o estás en el proceso de doblar una esquina.

Por tanto, no asumas que “sí, estoy en este proceso de revelación”, porque es probable que no lo estés. Solo estás pensando que lo estás, porque la idea te resulta atractiva o tal vez valida los cambios que has hecho en tus circunstancias externas. Pero la Revelación es un cambio profundo a nivel interno, un cambio tan sustancial que altera tu relación con todos y con todo. Y sucede más allá del ámbito y el alcance del intelecto.

Es misterioso. Tiene un poder diferente a cualquier otra cosa en el mundo. Habla a lo profundo y resuena a través de los pasillos de tu Mente Ancestral. Es diferente a cualquier otra experiencia que puedas tener en la vida.

No es embriagador. No es eufórico. Es profundo y fundamentado, real y esencial, como si algo en ti hubiera sido despertado —un poder que apenas conoces, un poder en el que aún no has aprendido a confiar, un poder que no puedes controlar.

Ha sido despertado por Dios. Ha sido despertado porque las circunstancias del mundo ahora lo están llamando. Ha sido despertado, y debes despertar con él.

Lo que ahora debes hacer es prepararte: tomar los Pasos al Conocimiento, construir tu relación con la mente más profunda, suspender tus creencias y suposiciones, mirar la vida y aprender a aquietar la mente, renunciar a la condena de los demás y del mundo, renunciar a las suposiciones sobre cosas de las que sabes poco y perdonar tus decepciones en el pasado y a los que sientes que te han herido o dañado. Haces esto porque hacerlo libera tu mente y te permite estar en el momento, plenamente presente.

Estás moviendote hacia la revelación cada hora de cada día. Es allí a donde el Conocimiento te está llevando. Es allí a donde debes ir.

Por supuesto, has hecho otros planes y vives una vida de acuerdo con esos planes y objetivos, mientras experimentas el caos de la vida diaria. Pero es allí [a la revelación] a donde el Conocimiento te está llevando, como ves.

Independientemente de lo que pienses sobre tí mismo, de cómo consideres tu vida, de dónde te encuentres geográficamente o de cuál sea tu posición social o tu situación financiera, el Conocimiento te está llevando hacia la revelación, porque solo la revelación permitirá que se cumpla la verdadera promesa de tu vida. Tus planes y proyectos nunca lograrán lo que solo Dios puede lograr a través de ti y contigo.

En la Separación sueñas y tienes pesadillas, y no sabes cómo navegar el mundo de circunstancias cambiantes. Por eso el Conocimiento te está llevando a la revelación, donde tu mente es capaz de recibir la presencia del Creador y donde puede producirse una transferencia de poder dentro de ti y a través de ti. Es donde unes tu diminuto pedacito de poder con el gran Poder del Creador, para lograr cosas en el mundo que siempre estuviste destinado a lograr aquí en concierto con ciertos individuos, con ciertas personas en ciertos lugares.

Pero debes acercarte a la revelación. No asumas que ya estás en ella, pero preparate para ella activamente. Haz de esto el centro de tu vida, y otras cosas comenzarán a ponerse en su lugar para ti. Encontrarás una fuente de fortaleza en el Conocimiento que no podrías encontrar en ninguna otra parte.

Este es tu antiguo acuerdo con Aquellos que te han enviado al mundo. Este es el cumplimiento de tu misión en el mundo. Esta es la preparación para esta misión, más allá de cualquier otra preparación que hayas realizado. Descuida esto y abandonarás tu realización en esta vida y la obligación y el acuerdo que tienes con aquellos que te enviaron aquí.

Todavía no sabes esto con certeza. Pero la Revelación te mostrará cuán verdadero es realmente al despejar por un momento todo lo demás, de manera que puedas ver en el brillo de la iluminación tu verdadera naturaleza y el propósito por el que estás en el mundo.

Esto se te mostrará en iluminación, pero todavía deberás pasar por el proceso de revelación. Volverás al mundo cambiado, pero no transformado. Seguirás siendo todavía tu viejo ser, pero con el nuevo ser comenzando a emerger. Es esta emergencia la que debes apoyar, o caerás de nuevo en la oscuridad de tu imaginación, en tu oscura historia, en la confusión y el olvido.

No hay certeza en el mundo, salvo la certeza que Dios ha puesto dentro de ti. Todo lo demás está sujeto a la descomposición y la decadencia, al colapso y al conflicto. Nada más es sólido y fiable.

Cuando veas esto y lo reconozcas en el proceso de revelación personal, ello te mostrará que tu vida ha sido salvada, que se te ha enviado un salvavidas, y que ahora debes aferrarte a él, seguirlo y reajustar tu vida a él. Encontrarás el coraje y el poder para hacerlo porque el Conocimiento está en ti. Y ganarás confianza, fuerza y compasión por los demás porque verás el gran proceso que esto supone.

Que el poder de la revelación te atraiga y puedas tener la sabiduría y la visión para prepararte para ella con verdadera determinación. Que puedas tener la sabiduría para reconocer que todas las demás cosas deben adaptarse a esta revelación o desprenderse de tu vida. Que este poder y esta presencia en tu interior puedan emerger. Y que puedas reconocer cuándo se ha producido la elección y respondas a ella con todo tu corazón y tu alma.