El Nuevo Mensaje de Dios

La humanidad ha llegado a un gran punto de inflexión en el que debe elegir una dirección diferente, una dirección que alterará el curso de la evolución y el destino humanos. La humanidad está llegando a los límites de lo que el mundo puede sostener y puede producir para una creciente población humana. Y la humanidad está afectando el equilibrio del mundo de manera tan significativa que está poniendo en marcha un gran cambio en el mundo físico, un gran cambio al que la humanidad tendrá que adaptarse en el futuro.

Hasta ahora, la humanidad se ha enfocado en el crecimiento y la expansión: ocupando nuevos territorios, desarrollando nuevos recursos, construyendo ciudades, expandiendo esas ciudades, entrando en conflicto unos con otros, conflictos regionales y grandes guerras. Pero ahora ha alcanzado un punto en el que ya no puede continuar con este comportamiento. Esto alterará por completo sus economías, sus instituciones financieras y el funcionamiento de sus gobiernos.

Tal como es hoy, la civilización humana es inestable y propensa al colapso. No ha logrado un equilibrio con el mundo. No ha establecido estabilidad y seguridad. Todas las razas del universo deben alcanzar este umbral, porque no pueden seguir creciendo y expandiéndose eternamente.

Es necesario que la familia humana sepa que más allá del sistema solar en el que existe su mundo, los recursos son propiedad de otros. La humanidad no puede reclamarlos. Y si piensa que podría ganar tal contienda, está gravemente equivocada.

Así que la humanidad tendrá que trabajar con lo que tiene aquí. Nadie del universo vendrá a rescatarla. Y aquellos grupos que están interviniendo hoy en el mundo y que prometen esto, representan un gran peligro para el futuro y la libertad de la humanidad.

Por tanto, la humanidad está llegando a un gran punto de inflexión. No puede continuar en la trayectoria en la que se encuentra, porque el mundo no puede sostener tal trayectoria, y eso llevará a la desintegración y el conflicto. Sin embargo, la humanidad está tan poco preparada para adaptarse a un conjunto cambiante de circunstancias en el mundo y a un modo diferente de vida, que existe la gran incógnita de si podrá doblar esta esquina y hacer esta adaptación.

Lo que la humanidad ha hecho en el pasado funcionó en el pasado, pero no funcionará en el futuro. Ha alcanzado un punto de saturación. Está entrando en territorio desconocido. Se está preparando para un futuro que será diferente al pasado.

Alimentos, combustible, agua: estas tres cosas serán los factores determinantes en gran medida. Siempre han sido muy importantes, y representan los recursos básicos de la civilización humana; de hecho, de todas las civilizaciones del universo. Pero ahora serán factores limitantes.

Sin embargo, las personas de todas partes, desde el ciudadano medio hasta los líderes gubernamentales y comerciales, no pueden contemplar vivir de otra manera. No pueden contemplar el establecimiento de estabilidad o seguridad en ninguna otra forma que no sea una mayor conquista, expansión y exploración. Si bien es cierto que habrá que innovar mucho para adaptarse a un mundo cambiante y para estabilizar las economías y la estructura política de las naciones, las personas no se dan cuenta de lo que habrá que hacer frente a las Grandes Olas de cambio.

Ahora la humanidad enfrenta el agotamiento de los recursos, una meteorología violenta, un medioambiente degradado, una creciente inestabilidad económica y política, y el riesgo de competencia, conflicto y guerra sobre quién obtendrá acceso a los recursos restantes.

Es realmente un momento desesperado. Quizá en la superficie existe una apariencia de normalidad, pero, por debajo, existe una búsqueda desesperada y frenética de recursos, así como una competencia desesperada y frenética sobre quién tendrá acceso a esos recursos.

Cada día, hay evidencia en todo el mundo de que estás viviendo en un mundo en declive, en declive biológico, y que esos mismos recursos de los que la humanidad depende en todas las formas imaginables, están disminuyendo o alcanzando sus límites. Será un gran desafío en el futuro determinar cómo se alimentará a la gente, no solo en las naciones más pobres, sino incluso en las naciones ricas.

Dios está advirtiendo sobre esto. Dios ha enviado un Nuevo Mensaje al mundo advirtiendo del poder y las consecuencias de las Grandes Olas de cambio, así como del poder y las consecuencias del encuentro de la humanidad con fuerzas del universo que, actualmente, están interviniendo en el mundo para aprovecharse de una humanidad débil y dividida.

La familia humana está entrando en tiempos de creciente inestabilidad y perturbación. Esto resultará muy confuso para las personas y no sabrán qué hacer. Y los gobiernos se encontrarán con recursos limitados para atender las necesidades cada vez más amplias y profundas que surgirán en este momento de inestabilidad. En efecto, es un momento de gran reconsideración. Es un punto de inflexión.

Dios ha enviado este Nuevo Mensaje al mundo a fin de advertir, preparar y fortalecer a la familia humana para enfrentar estos grandes cambios, y para traer una comprensión espiritual más profunda, de manera que las personas tengan la oportunidad de ganar una conexión con la fuente de la fortaleza dentro de sí mismas y en otras, porque esta fortaleza será necesaria.

Las señales del mundo ya te están diciendo que se avecinan cambios cada vez mayores. Puedes sentir esto. Independientemente de tus creencias, aspiraciones o preferencias, puedes sentirlo. Te sentirás nervioso, preocupado, ansioso, porque estás sintiendo el movimiento del mundo.

Puedes predecir cualquier número de resultados. Puedes acusar a individuos y gobiernos. Pero eso no es realmente lo importante. Lo importante es que estés conectado y que sientas un gran cambio en el mundo, el movimiento del mundo.

No pienses que todo esto será beneficioso. No creas que todo saldrá bien, o que conducirá a un plano superior de existencia o a algún tipo de transformación humana.

El movimiento del mundo puede producir cualquier resultado, dependiendo de cómo respondan las personas y qué escojan hacer. ¿Se unirán, sobrevivirán y prosperarán, o competirán entre sí, fomentando el declive del mundo y su propia ruina?

Escucha aquí tus sentimientos más que tus pensamientos. Retén tus juicios y la condena de otros. No busques respuestas fáciles, porque no existen tales respuestas. Enfrenta la incertidumbre y tu propia inseguridad.

Tú puedes hacer esto porque Dios ha puesto un Conocimiento más profundo dentro de ti, una fuerza más profunda en el núcleo mismo de tu Ser. Esta fuerza se llama Conocimiento. No tiene miedo. No tiene incertidumbre. Aunque todo lo que te rodea parezca estar temeroso, inquieto o incierto, el Conocimiento dentro de ti no tiene incertidumbre.

Siente el movimiento del mundo. ¿Qué se avecina en el horizonte que tú puedas ver? Deja a un lado tus ilusiones o tus proyecciones temerosas para ver lo que se avecina en el horizonte. Prepárate para hacer grandes cambios en tus propias circunstancias y en tu posición a fin de estar listo. No asumas que estás en el lugar adecuado y realizando las actividades correctas, porque esa puede ser una suposición muy peligrosa. Escucha tu experiencia, no tus ideas. En este asunto debes responder a un nivel más profundo. No te lamentes ni te resistas a las Grandes Olas de cambio, porque fuiste enviado al mundo para enfrentarlas y servir a la humanidad en este contexto.

Hay una parte de ti que es fuerte. Hay una parte de ti que es débil. Tu fuerza está en el Conocimiento. Tu debilidad está en tus miedos, deseos y creencias. Estos no son adaptativos. Se basan en preferencias, suposiciones y ansiedades.

Pero el Conocimiento dentro de ti está aquí en una misión. Está aquí para lograr cosas específicas con personas específicas. Su misión está más allá del rango y el alcance de tu intelecto. Tú solo puedes seguir esto y dar los pasos que proporciona. De esa manera y con el tiempo, tu mente llegará a comprender lo que realmente estás haciendo aquí.

Pero tú debes seguir. No puedes liderar. Esto no es cuestión de fuerza de voluntad. No es cuestión de establecer objetivos personales y alcanzarlos. Porque el Conocimiento está más allá del ámbito del intelecto. Porque tu verdadera identidad está más allá del ámbito del intelecto. Y aquellos que te enviaron al mundo están más allá del ámbito de tu intelecto.

Observa el mundo; no lo rechaces. Mira lo que está pasando en la economía. Mira lo que está pasando con respecto a la estabilidad de los gobiernos. Mira con tanta claridad, coraje y objetividad como puedas. No mires para otro lado, pensando que estas cosas solo te perturbarán. Debes enfrentarlas, porque están alterando las circunstancias de tu vida. Y debes prestar atención a estas circunstancias y a las olas de cambio que las están redirigiendo y alterando.

Al sentir el movimiento del mundo, experimentarás a veces una gran aprensión y quizá mucha tristeza, al sentir el sufrimiento que estos grandes cambios van a producir en tantas personas, las cuales no están preparadas o carecen de recursos para prepararse. Sin embargo, en otros momentos sentirás que estos grandes cambios son necesarios para llevar a la humanidad a una relación equilibrada con el mundo y a una forma de vida más estable y sostenible.

Tus sentimientos irán de un extremo al otro y por todo lo intermedio, porque las Grandes Olas de cambio producirán todo tipo de resultados. Te encontrarás a ti mismo ambivalente con respecto a este gran punto de inflexión. Lo querrás, pero a la vez no lo querrás. Buscas un cambio positivo. Buscas establecer una mayor estabilidad y seguridad para ti y para otras personas. Pero el proceso que puede hacer esto posible es muy desconcertante y peligroso.

Aquí tendrás que poner tu fe en el Conocimiento dentro de ti mismo y dentro de otros, porque tu fe en todo lo demás será sacudida. Y verás a las personas a tu alrededor incapaces de enfrentar esto, incapaces de lidiar con sus circunstancias cambiantes. Habrá mucha irritación, mucha ira, mucha resistencia, mucha confusión y desesperación.

Si el Conocimiento no estuviera contigo, la situación podría parecer totalmente desesperada. Y muchas personas pensarán que todo es inútil y caerán en la desesperación, volviéndose cínicas y hastiadas. Pero el poder del Conocimiento está dentro de ti. Y estos tiempos difíciles brindarán la mayor oportunidad para que emerja en tu experiencia si lo llamas, le das la bienvenida y reconoces su importancia.

Muchas personas no podrán cambiar su enfoque. Seguirán insistiendo en el mismo mantra, en el mismo énfasis, incluso si ese énfasis no tiene contexto y no puede llevarse a cabo. Habrá grandes intentos de tranquilizar a las personas por parte de los líderes del gobierno. Pero esto es más grande que su comprensión. Está más allá de su control.

En el futuro, la humanidad tendrá que encontrar formas humanas y adecuadas de limitar su población y contener el consumo de recursos, ya que la estabilidad y la seguridad solo serán posibles si esto se hace. Y la guerra tendrá que abandonarse por ser mutuamente destructiva.

¿Dónde encontrarás el poder para hacer esto? ¿Dónde encontrará alguien la fuerza para hacerlo? La vida tendrá que presentar un desafío muy fundamental para alterar el curso del destino humano y alterar las preocupaciones y el énfasis habituales de la humanidad. En esto, las Grandes Olas de cambio pueden ser verdaderamente redentoras.

Pero la humanidad ha elegido aprender bajo condiciones duras. Ha escogido aprender bajo sufrimiento y privaciones. Incapaz de unirse en tiempos de mayor prosperidad, ahora tendrá que unirse en tiempos de gran dificultad.

La vida le está dando ahora a la familia humana un gran reto: Unirse y sobrevivir. Porque si no se une, no podrá mantener la civilización humana y fracasará. Si está dividida, fracasará. No podrá cumplir con los requerimientos de la vida en un mundo cambiante. Y fracasará porque otras razas del universo vendrán a dominarla, y la dominarán no por el ejercicio de la fuerza, sino por el poder de sus persuasiones.

Esto, por supuesto, parece imposible. Desde un punto de vista normal, parece descabellado. Suena increíble porque es muy diferente del pasado. Pero, realmente, es a esto a lo que se enfrenta la humanidad. ¿Cómo funcionará la civilización humana con límites en los alimentos, el combustible y el agua, sin mencionar los otros innumerables recursos que se requieren para su tecnología y la producción de todo lo que usa?

La humanidad está despilfarrando su herencia natural. Y ahora debe afrontar un futuro más restrictivo. Ciertos individuos están sintiendo esto tremendamente. Se dan cuenta de que están en un gran punto de inflexión. Pero todos a su alrededor continúan como si nada, asumiendo ciegamente que el futuro será como el pasado, asumiendo ciegamente que las condiciones de sus vidas permanecerán sin cambios en el futuro.

Es muy difícil ser la persona que ve mientras las personas a tu alrededor no lo hacen. Pero este ver supone una gran ventaja, porque te da tiempo para prepararte. Te da tiempo para reconsiderar tu situación, tus fortalezas, tus debilidades, tus ventajas, tus desventajas. Te da tiempo para cambiar tus circunstancias en cualquier forma que sea necesaria. Te da tiempo para recobrar tu fuerza y ​​superar tu propia ambivalencia y resistencia. Ver la verdad te aleja de los demás hasta cierto punto, pero las ventajas superan con creces estas dificultades.

Si estás sintiendo las Grandes Olas de cambio que se avecinan, no desesperes. No gastes tu fuerza vital culpando a otros, condenando a individuos o instituciones. Porque es la humanidad en conjunto la que se ha llevado a sí misma hasta este punto. Y tú estás aquí para servir al mundo bajo estas condiciones radicalmente cambiantes.

Por tanto, pon tu énfasis en las condiciones y circunstancias de tu vida, y concéntrate en descubrir este propósito mayor, reconociendo que existe más allá del ámbito de tu intelecto, que es puro y que no se ve afectado por tus miedos y preferencias. Tus miedos y preferencias solo te impiden acceder a esta corriente más profunda de tu vida.

El mensaje aquí es muy simple, pero es difícil de aceptar, porque representa una reevaluación muy completa de tu propia existencia, así como un cambio de lealtad desde tu intelecto y tu condicionamiento social a una autoridad más profunda dentro de ti. Es este cambio el que representa el verdadero desarrollo espiritual y el verdadero refinamiento de tu vida. Este cambio no ocurre súbitamente, sino de forma gradual. Como si fueran las manecillas de un reloj, se mueven y tú debes moverte con ellas.

El fracaso en responder a las indicaciones de lo que debes hacer en tu vida conducirá a resultados muy infelices. Lo que hagas hoy marcará en gran medida tus circunstancias futuras, determinando si en el futuro podrás tener éxito o no. Es por eso que no es tiempo de evasiones o autocomplacencias. No es tiempo de tener una falsa seguridad en ti mismo. No es tiempo de perderte en tus intereses y pasatiempos, porque hay un gran trabajo que hacer en tu vida, dentro de ti mismo y también con respecto a tus circunstancias.

El mundo te está diciendo que se avecina un gran cambio. El Conocimiento dentro de ti te está diciendo que se avecina un gran cambio. Un gran cambio significa que debes reconsiderar lo que estás haciendo: tus condiciones de vida, tu trabajo, tus medios de transporte, la fuerza o debilidad de tus relaciones y asociaciones con otros. ¿Estás en el lugar correcto? ¿Estás con las personas adecuadas? ¿Estás comprometido con el propósito apropiado?

El Conocimiento dentro de ti te dará la indicación de cuál es la verdadera respuesta a estas preguntas. Y abrirá tu vida, mostrándote todo lo que no sabes, todo lo que debes aceptar para despejar las falsas suposiciones y la fe que tienes en muchas cosas que no podrán sostenerte en el futuro. Esto representa una evaluación profunda, una reconsideración interna, una transición de poder desde tus creencias y suposiciones a la presencia del Conocimiento dentro de ti.

Dios te ha dado el Conocimiento para guiarte, protegerte y prepararte para descubrir, experimentar y entregar tus mayores regalos a un mundo necesitado. Pero esto representa una vida muy diferente a la vida que estás viviendo hoy, así como un conjunto muy distinto de circunstancias y valores.

El mundo te está ayudando ahora en este descubrimiento al poner en peligro, quitarte o alterar las cosas de las que dependes y que das por sentadas. Esto te hará ser más realista y te motivará a establecer relaciones más genuinas y eficaces con otras personas, así como una relación más sobria y eficaz con la vida.

Te sacará de la fantasía. Te sacará de la adicción. Te sacará de tu obsesión contigo mismo. Te librará de intentar realizarte en función de tus preferencias y ambiciones. Te liberará de relaciones y actividades sin sentido. Te liberará del intento de determinar cuál es tu mayor propósito, porque la vida te mostrará lo que debes hacer. Y esto dará énfasis, certeza y prioridad a tus acciones.

No busques aquí paz y ecuanimidad, porque debes implicarte. Debes darte cuenta de lo que está cambiando a tu alrededor. Y debes buscar el Conocimiento para saber qué hacer, saber cómo prepararte y dar todos los pasos que debes dar ahora para reorientar tu vida, para fortalecerla, para fortalecer tu conexión con el Conocimiento, para determinar cuáles de tus relaciones serán realmente capaces de avanzar contigo y cuáles no, quién responderá a las Grandes Olas de cambio y quién no lo hará hasta el último momento.

Este es un inmenso regalo para ti si puedes verlo claramente y entender lo que está llamando en ti. De lo contrario, te parecerá un inmenso inconveniente, una tragedia, algo que querrás evitar y de lo que intentarás escapar. Pero no puedes evitar o escapar de las Grandes Olas de cambio. Y todos tus planes para salvarte a ti mismo solo te pondrán en mayor peligro.

En vez de eso, debes fortalecer tu vida. Y debes construir relaciones sólidas con otras personas que están fortaleciendo sus vidas. Debes encontrar a otros que estén respondiendo al poder y la presencia del Conocimiento dentro de sí mismos y que muestren una verdadera promesa de avanzar y hacer este descubrimiento.

Siente el movimiento del mundo. Siente el movimiento de la vida dentro de ti. Sabes que se avecina un gran cambio. Sabes que debes prepararte. No sabes cómo, pero sabes que debes prepararte. Sabes que hay ciertas cosas que debes hacer ahora para empezar. Una vez que empieces, te vendrán a la mente otras cosas que debes entender, que debes alterar o abandonar.

Así es como el Conocimiento te guiará. No te dirá todo lo que debes hacer desde el principio, pues eso te resultaría abrumador. Pero te dará cosas que hacer por etapas. Y debes hacer estas cosas tan rápida y completamente como puedas.

El poder y la presencia del Conocimiento viven dentro de ti. Has venido al mundo en un momento de grandes cambios. Y has venido trayendo regalos, regalos que tú mismo no puedes descubrir hasta que el Conocimiento los haga surgir dentro de ti.

Deja a un lado tus creencias y preferencias el tiempo suficiente para poder ver con claridad y comenzar a conectarte con tu experiencia más profunda. No escuches o sigas a otros ni seas esclavo del consenso que te rodea, porque vives en un mundo donde las personas han olvidado su Fuente y su centro en el Conocimiento que vive en su interior.

Encontrarás que, en casi todos los casos, las creencias, las expectativas, las reprimendas y el énfasis de las personas no están guiados por el Conocimiento. Esto te mostrará la gran necesidad de la humanidad. Te mostrará la gran necesidad en tu propia vida. Y te mostrará la promesa y el poder que portas dentro de ti.

Esto te aportará alegría y confirmación, así como un sentido más profundo de resonancia. Te sentirás mejor estando conectado a tu experiencia más profunda. Esto afirma la vida. Te dará fuerza y ​​coraje y te guiará hacia delante.