Texto original: Spiritual Powers in the Universe (no disponible online)
Esta revelación es el capítulo 5 de un antiguo libro introductorio.
Lo que estás leyendo en este texto es la transcripción de la voz original de la Asamblea Angélica hablando a través del Mensajero Marshall Vian Summers.
Aquí, la comunicación original de Dios, que existe más allá de las palabras, es traducida al lenguaje y el entendimiento humanos por la Asamblea Angélica que supervisa el mundo. La Asamblea después entrega el Mensaje de Dios a través del Mensajero, tras lo cual es transcrito y puesto a tu disposición y a disposición de todos.
En este extraordinario proceso, la Voz de la Revelación está hablando de nuevo. La Palabra y el Sonido están en el mundo. Que puedas ser el receptor de este regalo de Revelación y puedas estar abierto a recibir su Mensaje único para ti y para tu vida.
En todo el universo físico, incluso en esta parte de la galaxia, hay muchas fuerzas espirituales trabajando para el Creador. Hay individuos inspirados, hay razas de seres espiritualmente avanzadas y están los ángeles y sus ayudantes.
La humanidad tiene grandes aliados en el universo. Es de vital importancia que lo sepas, porque a medida que aprendas sobre la Intervención y la Oscuridad Mayor que está en el mundo necesitarás saber que la humanidad tiene dichos aliados, de lo contrario podrías llegar a tener mucho miedo. Los aliados de la humanidad son seres físicos que viven en el universo. Representan naciones espiritualmente avanzadas que buscan mantener viva la libertad y promoverla en el universo. Ellos se interesan especialmente por los mundos emergentes en sus alrededores, como el de la humanidad, porque reconocen que los primeros en visitar dichos mundos serán, generalmente, exploradores de recursos o colectivos económicos. Los aliados de la humanidad entienden que la familia humana, como muchas otras razas que están emergiendo a la Comunidad Mayor en este momento, es muy vulnerable a una Intervención como la que está experimentando ahora.
Cuando comiences a aprender sobre las realidades de la vida en la Comunidad Mayor, tal vez pensarás que la vida en el universo es muy mundana y que realmente no hay mucho que pueda evocar gran esperanza. Sin embargo, no es así. En el universo, como en este mundo, hay fuerzas para el bien, y hay lo que podría llamarse fuerzas “disonantes”, que intentan obstruir o frustrar la intención del Creador. A menudo, esto lo hacen simplemente por ignorancia. Sin embargo, también hay fuerzas verdaderamente malignas en el universo, que están enfocadas en la conquista y la destrucción. Aquellos que están interviniendo hoy en este mundo caen más en la primera categoría. Son ignorantes. No tienen una tradición espiritual propia. No son conscientes de la realidad del Conocimiento en el individuo. Representan poderes mundanos en el universo que buscan recursos y alianzas con mundos de importancia estratégica.
La libertad está siendo promovida en todo el universo. Sin embargo, al igual que en este mundo, no se practica en un grado muy alto en muchos lugares. Las razones de ello son las mismas que en este mundo: la falta de desarrollo espiritual y la falta de libertad personal para explorar. En realidad, no hay muchas sociedades libres en la Comunidad Mayor que estén tecnológicamente avanzadas. Esto también es cierto en el mundo de la humanidad. Realmente, la verdadera libertad está solo en su etapa inicial en este mundo, pero se ha practicado durante mucho más tiempo en otros lugares. Aquellos que son los verdaderos aliados de la humanidad la han practicado durante mucho tiempo. Para ellos, la libertad fue difícil de ganar y ha sido difícil de mantener, como también lo será para la familia humana.
Esta es la realidad de la vida en este nivel de existencia. Por tanto, es necesario que entiendas quiénes son los verdaderos aliados de la humanidad. Los que están interviniendo en el mundo se presentarán como sus aliados. Afirmarán que han venido aquí para ayudar a la humanidad a aprender a vivir en paz y rescatar su medioambiente. Pero esto es solo una táctica para conseguir la lealtad y la aceptación humanas. Es fundamentalmente falso.
Los verdaderos aliados de la humanidad no están visitando el mundo. Ellos enviaron a varios de sus emisarios a posicionarse en el sistema solar cerca de la Tierra, para ser testigos de la Intervención extraterrestre que está ocurriendo aquí y enviar su informe y análisis, lo cual han hecho. Este informe de los aliados de la humanidad es sumamente necesario para permitir a la familia humana comprender las realidades que enfrenta con la Intervención y darle una ventana a través de la cual ver las mayores interacciones de la vida inteligente en esta parte de la Galaxia en la que vive. Sin esto, la humanidad no tendría forma de saber por completo con quién y con qué está tratando. No entendería la organización de los que están interviniendo en el mundo. No entendería sus intenciones o sus métodos, ni aquello que frena y limita sus actividades en este planeta.
El informe de los aliados de la humanidad está ahora disponible en forma de libro. Explica estas cosas y proporciona la conciencia esencial que la humanidad necesitará. Puede que en este punto te preguntes: “Bueno, ¿por qué el Creador necesita que los aliados de la humanidad informen sobre estas cosas? ¿Por qué no hacer simplemente que los ángeles nos lo digan?”. Hay dos razones fundamentales. Primero, la humanidad necesita saber que tiene aliados en el universo. Estos aliados son conscientes del aprieto de la familia humana, entienden sus fortalezas y debilidades y comprenden muy claramente las fuerzas que están tratando de intervenir en el mundo en este momento.
La segunda razón es que la familia humana necesita aprender de aquellos que han experimentado las mismas cosas que ella enfrenta ahora. Necesita aprender de aquellos que viven en el universo físico y han desarrollado una conciencia y sabiduría de la Comunidad Mayir a través del tiempo. Ellos han enfrentado intervenciones similares en el pasado, cuando sus respectivos mundos estaban cruzando la transición que supone emerger a la Comunidad Mayor. Ellos tienen experiencia de primera mano en lo que la humanidad está empezando a enfrentar ahora. Ellos entienden los problemas en la comprensión de la familia humana. Ellos entienden lo fácil que será para ella negar esta mayor realidad. Ellos mismos han vivido todo el proceso de caer en una intervención y tener que recuperar su libertad en circunstancias muy difíciles.
Por tanto, su testimonio es de vital importancia para la humanidad, que está empezando a desarrollar una conciencia y comprensión de la Comunidad Mayor. Ellos sirven al Creador en su misión de servir a la humanidad. Su testimonio respalda las revelaciones sobre la Comunidad Mayor que forman parte del Nuevo Mensaje de Dios.
Los Poderes Espirituales en el universo deben afrontar las limitaciones que existen en cada mundo. Esto incluye las limitaciones de la cultura, de la libertad e incluso de la religión, pues las limitaciones existen en muchas formas diferentes en la Comunidad Mayor. En muchos lugares estas limitaciones son bastante severas.
La libertad individual, tal y como la conoces en este mundo, es realmente muy inusual en el universo. Las sociedades altamente tecnológicas son bastante uniformes y son gobernadas con un rigor y una conformidad que encontrarías difícil de tolerar. En esto, la humanidad tiene en última instancia un regalo que ofrecer a otras razas si puede mantener y desarrollar esta libertad para sí misma.
Sin embargo, para que se realice este mayor potencial la humanidad debe atravesar este difícil umbral de emerger a la Comunidad Mayor. Todos los verdaderos Poderes Espirituales que sirven a la familia humana en el mundo actual, tanto dentro de la realidad física como más allá de ella, sirven a este reconocimiento y a la emergencia exitosa de la humanidad a la Comunidad Mayor.
Es importante observar aquí que una gran parte de la resistencia al Nuevo Mensaje de Dios provendrá de las instituciones y líderes religiosos del mundo actual. Aquello por lo que rezan, que es la salvación de Dios, será aquello mismo que resistirán cuando finalmente llegue. Porque no necesariamente hablará a través de sus tradiciones. Tampoco validará necesariamente sus creencias, ni rendirá un homenaje especial a sus maestros espirituales y fundadores. Sin embargo, no se opondrá a sus instituciones. El Nuevo Mensaje de Dios no busca colocar a una religión por encima de otra, sino hablar de lo que es verdadero, genuino y fundamental dentro de todas ellas. Sin embargo, y a pesar de esto, encontrarás que habrá una tremenda resistencia y rechazo al Nuevo Mensaje de Dios por parte de muchos que hoy representan las tradiciones religiosas del mundo. El Creador lo entiende. La presencia angélica lo entiende. Incluso los aliados de la humanidad en el espacio, aunque hayan vivido en circunstancias muy diferentes, también podrán entenderlo.
Esta resistencia al Nuevo Mensaje de Dios representa parte del dilema de la humanidad. Este dilema forma parte de la realidad de vivir en un entorno comprometido. No es, de ninguna manera, una situación de aprendizaje perfecta. Es una situación de aprendizaje muy comprometida.
Sin embargo, esto debe aceptarse si la humanidad ha de sobrevivir y avanzar y el Nuevo Mensaje de Dios debe ser recibido aquí de alguna manera. Todo aquel que tenga fuertes afiliaciones y creencias religiosas tendrá que ser muy valiente para aprender sobre el Nuevo Mensaje de Dios. Es difícil aprender algo nuevo cuando uno piensa que ya tiene la respuesta. Es difícil reconocer un problema que básicamente uno no quiere reconocer.
Sin embargo, ten la seguridad de que todos los grandes emisarios espirituales que han venido a este mundo —tanto aquellos que han sido reconocidos como los muchos que no lo han sido— apoyan la emergencia de la humanidad a la Comunidad Mayor como una raza libre. Todos ellos están en armonía con el Nuevo Mensaje de Dios. ¿Cómo podría ser de otro modo? Lo que puede no estar necesariamente en armonía con el Nuevo Mensaje de Dios son las creencias, las costumbres y las tradiciones religiosas que se han creado sobre su testimonio y su demostración.
Sin embargo, esas cosas son creación humana y no divina. Por tanto, puedes estar seguro de que Jesús, Buda, Mahoma y todos los grandes emisarios espirituales, tanto conocidos como desconocidos, están en completa armonía con lo que aquí se presenta. Ellos también tuvieron que enfrentar la disensión, el conflicto, el rechazo y el ridículo. Ellos lo comprenden, porque esta es la naturaleza de entregar un Nuevo Mensaje de Dios en este mundo o en cualquier otro mundo en el universo físico. Cada uno es un entorno de aprendizaje comprometido. En la medida en que se haya logrado un verdadero avance espiritual y se haya compartido entre las razas y las sociedades, el grado de compromiso puede reducirse significativamente. Sin embargo, sigue siendo un gran problema.
Puede ser interesante para ti saber que las religiones tal y como las conoces en el mundo actual no son comunes en la Comunidad Mayor, particularmente entre las sociedades tecnológicas. Muchas de estas sociedades se han vuelto totalmente seculares en su orientación. Algunas han tenido poco en su historia reciente que indique algún tipo de tradición religiosa o entendimiento espiritual. Al igual que a la humanidad, a ellas les mueven las necesidades prácticas. Con el aumento de su tecnología necesitan cada vez más recursos, y si tienen establecimientos extranjeros deben mantener un control estricto. Es una situación muy complicada.
Sin embargo, no es algo tan complicado una vez que tienes un entendimiento de la Comunidad Mayor. Dios quiere que la humanidad se prepare para su futuro. Para que esto sea posible, la familia humana debe desarrollar una conciencia y comprensión de la Comunidad Mayor. Debe adoptar un enfoque muy sobrio de las realidades de la vida inteligente en el universo. Y debe tener evidencia de que tiene aliados allí, de lo contrario se sentirá demasiado sola y aislada para tener alguna esperanza de poder defenderse por sí misma.
La humanidad es muy semejante a una tribu nativa en la selva, viviendo en el aislamiento de sus propias creencias y asociaciones. Cuando se encuentra con exploradores del exterior, tiende a pensar en ellos de una manera muy romántica. Tiende a ser deslumbrada por su tecnología y a ser fácilmente intrigada por sus incentivos. Deja que la propia historia de la humanidad te enseñe las valiosas lecciones de la intervención aquí, pues no hay diferencia en este nuevo escenario, salvo en que esta Intervención es mundial y esta vez los nativos son toda la humanidad.
La Intervención depende del engaño y no de la tecnología para lograr sus resultados. En esta parte de la Galaxia no se permite una invasión directa de este mundo, y aquellos que están interviniendo hoy en el mundo no pueden llevarla a cabo de manera abierta. Los aliados de la humanidad, en su testimonio, revelan por qué esto es así. Debido a estas limitaciones, la Intervención debe apoyarse en la persuasión y el engaño.
Los que están interviniendo en el mundo actual son muy pocos y no pueden utilizar la fuerza militar para lograr sus objetivos. Aquí la humanidad tiene en su posesión una gran ventaja, una ventaja que apenas reconoce que tiene. Es esta ventaja la que debe desarrollar y cultivar, no solo para contrarrestar la Intervención sino también para contrarrestar futuras Intervenciones. Desarrollar esta ventaja proporcionará a la humanidad los cimientos que necesita para ser una raza más fuerte y unida en el universo.
La riqueza de este mundo, la base de recursos que dará a la humanidad no solo autosuficiencia sino también ventaja en la Comunidad Mayor, se está reduciendo a un ritmo alarmante. Una vez que obtienes una comprensión y perspectiva de la Comunidad Mayor, esto se vuelve obvio y te das cuenta del gran peligro que se está creando para el futuro de la humanidad.
Las personas tienen poca visión de futuro, por supuesto, y no lo ven. Sin embargo, una perspectiva y conciencia de la Comunidad Mayor supone una manera de verlo todo muy a largo plazo y de gran alcance. Si la humanidad malgasta sus recursos ahora se verá muy privada en el futuro. Esto hará que sea muy vulnerable ante la intervención extranjera.
La respuesta a este problema de disminución de recursos no es conquistar otros mundos. La respuesta es aprender a ser perspicaz, sabio y autosuficiente en la Comunidad Mayor. Esto es lo que los Sabios han tenido que aprender en todas partes, a menudo mediante grandes pruebas y muchos errores. Esta es una verdad universal, cierta aquí y en todas partes. Es por eso que el testimonio de los aliados de la humanidad es tan valioso: porque han logrado con éxito lo que la familia humana solo está empezando a hacer.
El Creador entiende todo esto, por supuesto. El Creador entiende que la humanidad debe adquirir esta fuerza y que debe establecer una resistencia a la Intervención. Sin embargo, esto debe hacerse con una comprensión clara, y el ímpetu para ello debe venir del Conocimiento dentro de cada individuo, porque este es el verdadero amor que el Creador les ha dado para que lo den al mundo. Algunas personas podrían pensar: “Bueno, resistir a la intervención no es algo muy amoroso”. ¡Pero es absolutamente amoroso! Consentir la Intervención no sería amoroso, aunque muchas personas piensan que el amor es una especie de comportamiento pasivo.
Pero el amor verdadero es hacer lo que tienes que hacer para asegurar la libertad y el bienestar de las personas. A veces, tienes que tomar acciones muy enérgicas en nombre de la libertad y el bienestar de los demás. A veces, tienes que ejercer tu poder e influencia con mucha fuerza para asegurarte de que esto se logre. Si tu hijo estuviera en peligro, ¿reaccionarías pasivamente? ¡Por supuesto que no! Reaccionarías enérgicamente, con mucha fuerza y quizá de forma muy dramática. Esto es totalmente apropiado.
Quizá la humanidad pueda permitirse seguir adelante generando pobreza, privaciones y conflictos en el mundo, pero no puede permitirse ignorar la Intervención. Cada día la Intervención se hace más fuerte, más y más gente está cayendo bajo sus persuasiones, y muchos más individuos se están volviendo sus apologistas y representantes. ¿Puede ignorarse esto sin grandes consecuencias? Es por eso que reconocer la intervención y resistirla es la necesidad más apremiante y urgente que hoy tiene la humanidad. Es como cuando los padres abandonan todas las demás preocupaciones al reconocer que su hijo está en peligro.
Hay grandes Poderes Espirituales sirviendo a todos los seres en la vida manifiesta. Las oportunidades para prestar sus servicios varían según la naturaleza de las sociedades y culturas a las que son enviados. Incluso los que están interviniendo hoy en el mundo tienen Poderes Espirituales que están intentando comunicarse con ellos, aunque los obstáculos para hacerlo son muy grandes.
Saber que hay grandes Poderes Espirituales preservando y construyendo la libertad en el universo y que la humanidad tiene aliados en el universo —aliados que son conscientes de su aprieto y están tratando de ayudarla sin intervenir directamente en su mundo— no significará nada si la familia humana no puede ver el problema fundamental que está enfrentando y no responde a él de una manera que sea genuina y constructiva.
Por tanto, todo se reduce a la conciencia y la responsabilidad. La humanidad está entrando a una era de cooperación y responsabilidad humanas. Este es un momento para la cooperación y la responsabilidad personal. El Nuevo Mensaje de Dios está siendo entregado para hacer esto posible. Sin embargo, la gente debe responder.
Aquellos que están en posiciones de poder en los gobiernos pueden no tener libertad para responder a una llamada y una necesidad tan grandes. Pueden no tener libertad para apoyar el Nuevo Mensaje de Dios. Por ello, el Nuevo Mensaje de Dios está siendo llevado a la gente —a la gente que es capaz de hacer esto, a la gente que tiene libertad para hacer esto.
En última instancia, el Nuevo Mensaje de Dios trata sobre la libertad: la libertad de sobrevivir, la libertad de mantener la autodeterminación y, más allá de esto, la libertad de que cada persona encuentre su llamada y su significado espiritual en la vida. Sin embargo, encontrar su significado y su llamada sería muy difícil sin la libertad de mantener y construir su autodeterminación.
El Creador está intentando salvar a la humanidad de una grave calamidad, una calamidad que ha sobrevenido a muchas otras razas emergentes en el universo. Es la calamidad que sobreviene a todo mundo que sucumbe a la dominación de cualquier otro mundo. El Creador quiere que la humanidad emerja a la Gran Comunidad como una raza libre y autodeterminada.
Esta es la gran transformación que debe ocurrir. Es ciertamente la gran necesidad de este tiempo. De todos los demás problemas crónicos que enfrenta la humanidad —y hay muchos—, este es el mayor. Porque ¿qué puede esperar la humanidad lograr por sí misma, en cualquier vía de esfuerzo, si su libertad fundamental ha sido cedida a una potencia extranjera? Pero esta no será una potencia extranjera humana, sino una potencia con un punto de vista y una ética completamente diferentes a los de la humanidad. Este es el gran desafío que la familia humana enfrenta ahora. La humanidad está espiritualmente equipada para lidiar con ello, pero debe tener la libertad necesaria incluso para empezar.
Muchas personas en el mundo actual están tan circunscritas por sus creencias, sus asociaciones políticas, sus puntos de vista religiosos o la naturaleza opresiva de sus propias culturas y gobiernos que ni siquiera tienen libertad para responder. Como resultado, es posible que no puedan recibir el regalo que Dios está dando. Así que, en todos los niveles, se trata de una lucha por la libertad.
Pero ¿para qué sirve la libertad en última instancia? Primero, existe la libertad de la mente para pensar. Con esto, existe la libertad del Espíritu para expresarse.
Por tanto, en última instancia, la libertad tiene que ver con la expresión del Espíritu. Esta es la libertad para encontrar y cumplir tu propósito mayor en el mundo. Esta es una libertad rara e invaluable. Nunca la des por sentada. Nunca supongas que abunda en el universo. Y nunca dejes de creer en ella y trabajar hacia ella, porque, una vez que haces eso, tu libertad ya se ha perdido.