Texto original: Resilience
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Lo que estás leyendo en este texto es la transcripción de la voz original de la Asamblea Angélica hablando a través del Mensajero Marshall Vian Summers.
Aquí, la comunicación original de Dios, que existe más allá de las palabras, es traducida al lenguaje y el entendimiento humanos por la Asamblea Angélica que supervisa el mundo. La Asamblea después entrega el Mensaje de Dios a través del Mensajero, tras lo cual es transcrito y puesto a tu disposición y a disposición de todos.
En este extraordinario proceso, la Voz de la Revelación está hablando de nuevo. La Palabra y el Sonido están en el mundo. Que puedas ser el receptor de este regalo de Revelación y puedas estar abierto a recibir su Mensaje único para ti y para tu vida.
La humanidad se encuentra en el umbral del mayor cambio mundial que haya experimentado jamás, un mundo que enfrenta un clima cambiante, graves trastornos y grandes discordias económicas y sociales, a medida que la humanidad encara una nueva experiencia mundial sin preparación: un mundo más difícil, un mundo de recursos cada vez más escasos y meteorología violenta, un mundo en el que la humanidad tendrá que tomar decisiones muy fundamentales sobre cómo responder y prepararse para una clase diferente de futuro.
Las personas del mundo todavía están dormidas u oprimidas. Los ricos están durmiendo, todavía soñando sus sueños de riqueza y realización personal, mientras la mayor parte del mundo lucha por sobrevivir bajo el peso de la pobreza y la opresión política y religiosa.
En esta situación aparentemente desesperada, el Señor de los universos ha traído un gran Mensaje para la humanidad, una Nueva Revelación para el mundo: una gran advertencia, un gran empoderamiento y una gran preparación.
Si pudieras reconocer verdaderamente la condición del mundo y tu propia condición en él, verías la gran necesidad de que Dios hable de nuevo. Y Dios ha hablado de nuevo, dando a la humanidad ahora la mayor Revelación que jamás se ha traído a este mundo, con el fin de preparar a la humanidad para un nuevo mundo y para su interacción con un universo lleno de vida inteligente —una Comunidad Mayor de vida, un gran panorama de vida, una comunidad de la que la humanidad no sabe nada en absoluto, un universo no humano donde la libertad es poco común.
Si tienes la honestidad y la humildad para comenzar a enfrentar la condición real de tu vida y de tu mundo, reconocerás que las grandes Revelaciones del pasado no pueden preparar a la humanidad para lo que está enfrentando ahora. Dadas en la antigüedad, fueron apropiadas para su tiempo y su lugar, y todavía contienen gran sabiduría y grandes enseñanzas para la humanidad, pero no pueden prepararte para lo que estás enfrentando ahora.
Dios lo sabe, por supuesto, pero la humanidad sigue perdida en sus preocupaciones, sus preceptos, sus conflictos, su lucha religiosa y su sentido de supremacía.
Es hora de que aprendas la verdadera naturaleza de la espiritualidad humana, tu conexión con tu Fuente y cómo Dios trabaja en el mundo, operando a través de la gente desde dentro hacia fuera.
Dios sabe que la humanidad está en una situación precaria, de la que no puede salvarse a sí misma. Está demasiado ciega. Está demasiado absorta. Está demasiado llena de desprecio y conflicto. No es lo suficientemente fuerte ni está lo suficientemente unida como para prepararse por sí misma. Con honestidad y humildad verás estas cosas, porque son innegables.
Te enfrentas a una situación de gran complejidad. Necesitarás una Revelación de Dios, así como tu propia inteligencia y tus recursos, para lidiar con esto, prepararte para esto, sobrevivir y, si puedes lograr estas cosas, para construir un futuro más grande para la familia humana —una mayor seguridad para el mundo, una mayor unidad para la familia humana, una mayor fuerza y una mayor permanencia en este mundo y dentro de la Comunidad Mayor en la que siempre ha vivido.
Los grandes Mensajeros del pasado, los cuales han venido todos de la Asamblea Angélica —Jesús, Buda y Mahoma—, están con el Mensajero que ahora está siendo enviado al mundo, el único Mensajero enviado con una gran Revelación de Dios.
Qué desafío será esta para todos los que puedan responder. Será un desafío que se suma al gran desafío del nuevo mundo y de la vida en el universo.
Pero Dios te ha dado una mayor fuerza y un mayor propósito para estar en el mundo en este momento. En lo profundo bajo el intelecto y tu mente personal, la cual ha sido tan condicionada, dirigida y manipulada por el mundo que te rodea, esta mayor Inteligencia contiene tu fuerza y el poder para navegar el gran cambio que se avecina. Tiene la claridad y la conexión con Dios para resonar con la Nueva Revelación de Dios para el mundo.
Las ideologías de la gente serán desafiadas, ya que Dios trae una gran corrección a la comprensión de la humanidad de las grandes tradiciones y del significado de la espiritualidad, el propósito de la humanidad y su destino último.
Qué gran desafío será esto para las personas que han construido toda su vida sobre un conjunto de creencias y preceptos, cuando en realidad no saben nada en absoluto sobre el Gran Plan y Propósito de Dios aquí.
Dios te ha dado ahora la fuerza. Vive dentro de ti, muy por debajo de la superficie de la mente. Es incorrupta. No tiene miedo. Porque representa la parte eterna de ti que aún está conectada a Dios, como ves. No está amenazada por el mundo. No vive en un estado de constante ansiedad como lo hace tu mente personal. No vive en un mundo de obsesión, distracción, ansiedad y desprecio —las cosas que rigen tu mente personal y las mentes de todos los que habitan aquí.
Dios entiende estas cosas. No hay ningún juicio contra la humanidad. No hay ningún castigo esperándote. Pero debes prepararte para las eventualidades. Debes ganar la posición desde la que ver lo que se avecina en el horizonte con ojos despejados, sin todas tus antiguas creencias y persuasiones políticas coloreando tu visión y cegándote.
No basta con que unos pocos individuos clarividentes se den cuenta del gran cambio, e incluso esa comprensión es incompleta, como ves. Pues no pueden ver el cuadro completo, ya que eso debe darse en una Revelación.
Si eres capaz de comenzar a enfrentar estas cosas, lo cual entendemos que es un gran desafío, te sentirás débil; te sentirás impotente. Puede que incluso te sientas desesperado. Te preguntarás cómo podrá la humanidad superar esto, cómo podrá unirse y aunar su sabiduría, su inteligencia, sus habilidades y sus tecnologías en una dirección positiva, en lugar de desperdiciarlas en la guerra y el conflicto. Porque no hay tiempo para eso ahora. No hay tiempo para tales tonterías.
Te preguntarás si hay alguna esperanza. Mirarás a tu alrededor y verás las mentes dormidas por todas partes. Mirarás al mundo y verás corrupción, conflicto, dificultades y disputas, así como una terrible pobreza por todas partes. Y te preguntarás: “¿Cómo podría funcionar esto alguna vez?”.
Aquí tu mente personal no tiene una respuesta. Aquí lo que has aprendido y te han enseñado a pensar no tiene una respuesta. Tus respuestas, incluso si fueran apropiadas, son solo parciales, porque ahora necesitarás mil respuestas y no las tienes todas.
Es tu Creador quien intervendrá en el mundo, lo cual solo ocurre, quizá, una vez cada milenio para alterar la dirección de la humanidad, para plantar las semillas de una mayor sabiduría, poder, fuerza y cooperación en el momento de mayor oportunidad y necesidad.
Tendrás que recurrir a esta fuerza que Dios ha puesto en ti y en los demás. Y tendrás que dar los pasos hacia este mayor Conocimiento, ya que no puedes encontrar el camino por ti mismo. Tendrás que reconocer que no puedes gobernar tu vida como un tirano. En realidad, no puedes gobernar tu vida en absoluto, pero debes manejar tu mente y tus asuntos y conocer la fuente de tu fuerza, la cual vive dentro de ti en este momento, esperando a ser descubierta.
Esta fuente está siendo invocada ahora, porque los cielos se están oscureciendo y el gran cambio está llegando, golpeando las costas, abrasando los desiertos, secando las tierras de cultivo. Está aquí y allí, creciendo en frecuencia, potencia y destrucción.
No puedes ser patético. No puedes ser débil. No puedes simplemente rezar pidiendo milagros, porque Dios te ha enviado aquí para hacer el verdadero trabajo que debe hacerse: tu propósito y actividad únicos, de los que aún no eres consciente. Porque son muy diferentes de tus metas y tus fantasías sobre ti mismo.
Si pudieras reconocer tu propia necesidad —siendo un extraño para ti mismo, viviendo una vida de lucha, de mundanidad, de indignidad y frustración—, verías tu necesidad de la Revelación. Ya sea que mires fuera o dentro, es esta misma honestidad lo que te llevará a este punto de reconocimiento.
Tal vez sientas que has logrado grandes cosas. Tal vez te sientas orgulloso. Tal vez desprecies a otros que no tienen nada o que fracasan en sus intentos de tener lo que tú tienes. Pero tú también estás en el umbral del gran cambio y no tienes una respuesta.
Todo lo que has adquirido puede perderse. Todo aquello en lo que crees puede ser destruido. Todo lo que asumes que es verdad puede ser deshecho. Porque aún no conoces el Poder que te ha traído y lo que realmente has de lograr aquí.
Dios está hablando ahora a un mundo alfabetizado, no a tribus primitivas que viven en sociedades guerreras y desconocen el desarrollo social y la libertad personal. Dios está hablando ahora a un mundo de comunicaciones globales y una creciente conciencia mundial.
Así que ahora la Revelación no consiste en temas pastorales o anécdotas, en historias que deben ser interpretadas por expertos o comentaristas. Se trae en el lenguaje más simple, con mucha repetición y aclaración. Se trae de esta manera para que pueda traducirse fácilmente a otros idiomas, y para sea expresada y entendida fácilmente por personas de todas las clases y posiciones sociales. La persona más pobre del mundo puede entenderla. Y, sin embargo, es tan profunda que no puedes sondearla. Su simplicidad expresa su gran profundidad.
Este es el milagro de tu tiempo, dado en un momento de gran necesidad, una necesidad tan grande que pocas personas son conscientes de ella o pueden afrontarla honestamente. Este es el milagro de tu tiempo. Es el milagro de tu vida. Porque has sido encontrado como una mancha en el océano, a la deriva y sin esperanza. Ya sea que vivas en la pobreza o en el esplendor, es todo lo mismo.
No basta con que unas pocas personas en el mundo sean capaces de recuperar su verdadero estado natural. La llamada debe ser ahora para que un mayor número de personas den un paso adelante, ya que este barco se está inclinando. Está entrando agua. Pero la gente sigue durmiendo en la cubierta, deleitándose bajo la luz del sol, sin saber que la misma nave sobre la que se encuentran está en peligro.
¿Quién sabrá estas cosas? ¿Quién puede mirar sin condena? ¿Quién puede mirar con compasión, incluso a aquellos que yerran tan gravemente?
La humanidad está viviendo en un sueño, un sueño de Separación. Sin embargo, ahora ha creado una condición para el mundo que cambiará su paisaje y todo lo que hay en él.
Ahora ha llegado a un punto en el que otras razas del universo buscarán ganar el control de este mundo. Tan valioso es, tan rico es. No comprendes su riqueza en un universo de planetas estériles y sociedades en dificultades.
La Revelación de Dios revelará cómo es la vida en el universo, además de lo que la humanidad debe saber para sobrevivir allí y construir y preservar allí su libertad, lo cual será un gran desafío.
Pero primero debes conocer tu fuerza, y debes construir tu resiliencia para vivir en un mundo cambiante, para vivir en un nuevo mundo. Debes tener una mayor fuerza para superar tus dudas, tus miedos, tus debilidades, tus preocupaciones y tus tendencias.
Dios te ha dado esto. Ha estado contigo todo el tiempo —esperando a ser descubierto, esperando el momento en que necesitaría ser llamado, esperando las circunstancias a tu alrededor que lo harían necesario e imperativo para tu bienestar y tu realización en el mundo.
Porque has venido aquí para dar y servir. Tienes regalos únicos que deben ser abiertos dentro de ti, porque no puedes abrirlos por ti mismo.
El Conocimiento más profundo dentro de ti puede reformar tu vida y prepararte para tu nueva vida en un nuevo mundo. Tal vez no puedas ver todavía que este es el mayor regalo posible que puedas recibir.
Cualquier oración que hagas a tu Fuente ya ha sido contestada, debido a lo que se ha puesto dentro de ti para guiarte, corregirte y darte fuerza, certeza y compasión en un mundo donde la gente estará cada vez más desorganizada y desordenada, llena de ansiedad y aprehensión.
Debes crear la conciencia y luego la resiliencia. En este momento, eres perturbado fácilmente incluso por tus propios sentimientos, dudas y pesadillas.
Piensa en lo perturbado que estarás cuando veas el mundo desmoronándose a tu alrededor, cuando tengas que enfrentarte al nuevo mundo, cuando tengas que enfrentarte a la realidad de que la libertad humana está siendo amenazada por una Intervención externa.
Con este entendimiento, te darás cuenta de que debes construir tu fuerza. Y Dios ha provisto los Pasos al Conocimiento para construir esta fuerza y esta capacidad para entender, saber y ver; para aprender a ver tus propios errores y debilidades con compasión y aprender a manejarlos, controlarlos y corregirlos si es posible. No tienes esta fuerza todavía, no lo suficiente.
Te gobierna la debilidad, pero debe gobernarte la fuerza. Sin duda, lo que es débil en tu interior debe seguir a lo que es fuerte dentro de ti. Ciertamente, lo que es tonto en tu interior debe seguir a lo que es sabio.
Lo que es fuerte y sabio en tu interior es el Conocimiento que Dios ha puesto dentro de ti, un Conocimiento que representa tu estado eterno y la conexión con tu Fuente.
Sin esto, solo puedes creer en Dios, arrodillándote y adorando por miedo a que Dios te castigue si fracasas. Pero esta no es la fuerza que necesitarás para recuperar tu conexión con tu Fuente o para sobrevivir y navegar el nuevo mundo a tu alrededor.
La astucia, el ingenio, la filosofía, la tecnología… sin el Conocimiento, todas estas cosas te fallarán. No bastan. Y no sabes cómo usarlas eficazmente, porque todavía te guía tu mente personal, la cual es temerosa, impulsiva y arrogante.
La mente debe servir al Conocimiento. El Conocimiento siempre servirá a Dios. Esta es la verdadera jerarquía dentro de ti. Este es la verdadera ascensión del poder.
Todo es importante aquí. Tu cuerpo es importante como vehículo de comunicación en el mundo. Tu mente es importante como vehículo de comunicación en el mundo. El Conocimiento dentro de ti está en el mundo para comunicarse. Porque has sido enviado por aquellos que están más allá, los cuales te están observando incluso en este momento.
Es este despertar lo que debe suceder. Es la resiliencia que debe construirse. Es la fuerza, la compasión y la determinación que debe surgir dentro de ti, no desde tus ideas, no solo desde tu voluntad, sino desde la mayor fuerza que vive dentro de ti.
Solo esto tiene el poder de llevarte a un nuevo mundo y a una Comunidad Mayor de vida, la cual es tu destino, dentro de la cual siempre has vivido, y para la que ahora debes prepararte.