El Nuevo Mensaje de Dios

Dios no tiene que resolver tu dilema. Dios simplemente te atrae y tu dilema se desmorona.

Existe mucha presunción y malentendido sobre cosas muy básicas, lo que hace que la aproximación directa al Conocimiento parezca más complicada de lo que realmente es. Nosotros hablamos del desarrollo del Conocimiento, de las relaciones y de los acontecimientos del mundo de una manera muy directa, pero las personas aún están muy confusas, porque han asumido que la vida espiritual, los maestros espirituales, la enseñanza espiritual y las ideas espirituales deben tener cierta concordancia. Por eso, es apropiado hablar de verdades espirituales.

Primero, es muy importante que reconozcas que no hay una verdad absoluta en la vida física. Es muy importante entender esto, porque la verdad absoluta está reservada para un estado absoluto del ser, y la vida física obviamente no es eso. En su lugar, tenemos una verdad relativa, relativa a este estado de ser.

Dios está funcionando aquí en una realidad relativa. Es relativa porque está cambiando. Una realidad absoluta es una realidad inmutable. Es un estado estable y completamente en paz, porque no va a ninguna parte. Tú no estás en esa realidad, ni siquiera la buscas aquí en su mayor parte, porque no es tu necesidad. No estás listo para la realidad absoluta. No es tu etapa en la vida. Primero debes realizar tu tarea aquí, en esta realidad relativa.

Cuando las personas comienzan a pensar que Dios tiene una verdad absoluta para su realidad relativa, esto da comienzo a una forma de tiranía que es muy peligrosa y difícil de superar. La tiranía religiosa, la tiranía política y la tiranía personal son evidentes dentro de las personas y dentro de las sociedades en general. Intentar aplicar una verdad absoluta a una situación relativa produce servidumbre y esclavitud y es completamente contraproducente. Su intención inicial pudo haber sido bienintencionada, pero pronto produce violencia y ataque.

El desafío para todos y cada uno de ustedes es aceptar que están en una fase de desarrollo, e intentar no descansar su sentido de identidad en absolutos. Debes ser abierto y sin embargo muy firme sobre lo que ya sabes. Esta firmeza y apertura es un logro. ¿Qué has descubierto hasta ahora que sabes que es irrevocablemente cierto? Esto debes sostenerlo con gran reverencia. Sin embargo, esto es más una Presencia espiritual que una idea, un sentido profundo de relación y dirección en la vida, más que una serie de creencias o postulados.

No puedes acercarte a un Dios absoluto en una realidad relativa. No funciona, porque no es ahí donde te encuentras. Solo una de cada diez millones de personas está preparada para un encuentro absoluto con Dios. Esta no es la necesidad de la humanidad. Dios no está reservado para uno de cada diez millones. El Plan de Dios incluye a todos y garantiza la realización y el progreso en esta realidad en la que vives.

La siguiente etapa de la vida, más allá del ámbito físico, también será una realidad relativa, pero será absoluta para tus necesidades, porque la verdad relativa es absoluta para tus necesidades. Así que no pienses que no es significativa ni eficaz. La verdad relativa es tremendamente eficaz. Es más poderosa que cualquier cosa que puedas ver o imaginar, y se mueve. Está yendo a alguna parte.

¿Cuál es el propósito en la vida? No es una definición. No es la adhesión a una creencia. Es moverse con la vida. Es movimiento. Eso es lo que lo hace relativo. Es ir de aquí a allá. Es ir a algún lado. Los absolutos no van a ninguna parte. Ya han llegado. No hay más movimiento. Todavía no estás en un lugar de realidad absoluta. Por eso, tu intento de alcanzar la verdad absoluta será un autoengaño y te mantendrá lejos del verdadero logro que podrías estar realizando ahora.

La tiranía religiosa se hará muy evidente en el mundo en los próximos años. Este es el resultado de las personas sosteniendo una idea absoluta en una realidad relativa. Producirá violencia y odio, todo lo que es contraproducente.

Por tanto, si eres serio en el desarrollo del Conocimiento y cosechas la satisfacción verdadera en esta vida, debes ser muy firme pero muy abierto. Debes adherirte a lo que conoces ahora, pero no creer que es el punto final. Estás moviéndote de un lugar a otro, así que no te establezcas en la apariencia de las cosas.

Tu futuro estará en gran medida determinado por tu capacidad de responder a los acontecimientos externos, y a tu propio Conocimiento interno. No puedes hacerlo si estás basando tu vida en una idea absoluta, porque en el momento en que lo haces, te detienes. Ahora no vas a ninguna parte. Estás detenido al lado del camino, sosteniendo tu signo para que el mundo lo vea, y la vida te pasará de largo, seguramente, porque ella va a algún lado. Su destino está más allá del mundo, porque es ahí adónde vas.

No viniste a este mundo para quedarte aquí mucho tiempo, así que obviamente siempre estás regresando. Desde el momento del nacimiento, estás regresando a casa. Has venido aquí por dos razones, y estas razones son contradictorias: Has venido para esconderte de Dios, porque este es el lugar donde Dios parece no existir, y has venido para servir a Dios. Estas razones son solo contradictorias porque representan los dos aspectos de tu mente —la parte de ti que cree que has dejado a Dios y la parte de ti que nunca ha dejado a Dios—. La parte de ti que nunca ha dejado a Dios solo puede servir a Dios, porque fuiste creado para servirle. Servir a Dios es tu alegría y tu éxtasis. No es una forma de esclavitud. Es una verdadera delicia, ¡de hecho!

Pero ese es tu Conocimiento, no es tu realidad personal. Tu realidad personal trata de esconderse de Dios, y entonces el mundo se vuelve un lugar donde aprendes a llenar cada momento del tiempo con sensaciones y estímulos, para no tener que pensar en Dios. Es solo cuando esta estimulación comienza a fallarte y a decepcionarte constantemente, que vuelves tu atención a Dios, porque después de un tiempo, Dios es realmente lo único que queda. No importa si Dios es irracional o si nadie más piensa en Dios, ahora pensarás en Dios porque no tienes nada más que hacer. Has agotado a todos tus sustitutos, y entonces comienzas a pensar en Dios.

Puede que no pienses necesariamente en Dios como Dios, pero empezarás a pensar en las cualidades que son de Dios: el deseo de servir a la humanidad, el deseo de paz sobre la estimulación, el deseo de ecuanimidad sobre excitación, el deseo de integridad y honestidad, el deseo de movimiento y progreso. Eso también es pensar en Dios.

Estas no son cosas en las que piensas si tu objetivo principal es ocultarte. Cuando te estás ocultando, quieres olvidar que te estás escondiendo, porque esconderte es aterrador y no es muy divertido. No quieres tener miedo todo el tiempo, por lo que intentas hacer divertido el escondite. Pero no es divertido, porque estás solo y alejado, en una realidad muy dura, que esperas que esta amable contigo. Esperas que haya un Dios, pero no esperas encontrarte hoy con Dios, porque encontrarte con Dios hoy sería demasiado. Pero esperas que Dios esté ahí cuando lo necesites. Es como ser un niño que no quiere estar cerca de sus padres, pero espera que sus padres estén ahí en caso de que surjan problemas.

Es divertido alejarse de casa hasta que oscurece y tienes hambre. Entonces quieres ir a casa, porque ahora toda la motivación para huir se ha desvanecido. Buscas refugio, comodidad y seguridad. Pero cuando vienes al mundo y te sientes cansado y hambriento, no puedes ir a casa, porque estás aquí. ¡Pero Dios también ha venido! Dios te acompaña en todas partes. Así que huyes y Dios te acompaña. No puedes zafarte de Dios. Afortunadamente, esto es cierto.

No puedes simplemente creer en Dios y afirmar: “Esta es la palabra de Dios en este libro”, o “la realidad de Dios debe ser de esta manera para que Dios sea significativo y bueno”. No basta simplemente con intentar resolver las aparentes contradicciones sobre Dios. Dios no necesita resolver estas contradicciones, porque Dios es simplemente Dios.

Tu mundo es contradictorio porque es un escondite, un lugar donde van las personas que no quieren saber nada. Sin embargo, tu propósito al estar aquí es recordar lo que sabes y ayudar a otros a recordar lo que saben. Cuando te escondes, piensas que alguien te castigará. Has sido malo. Es como huir de casa como un niño pequeño. Te escapas y tienes miedo de ir a casa porque tus padres te castigarán.

Ahora has huido muy lejos, y es muy aterrador volver a casa. Por mucho que quieras, es muy aterrador. “¡Oh, no puedo volver a casa!”. Esa es la raíz de todo tu miedo. Está por debajo de tu psicología y es tan fundamental que abordarlo directamente separaría las muchas capas de ilusión que enfrentas todos los días.

Cuando las personas comienzan un desarrollo serio del Conocimiento, comienzan a encontrar la raíz de su temor a Dios. Por alguna razón, tienen problemas para hacer esta o aquella práctica, aunque las prácticas son fáciles. O son olvidadizos. O si sienten la Presencia, no quieren sentirla por más de unos minutos. Es demasiado. No hay nada malo en eso. Es simplemente un proceso que requiere mucho tiempo para volver a familiarizarse con tu Hogar. Cuanto más te familiarizas con tu Hogar, menos importancia tiene tu escondite para ti, y más reconoces que estás aquí para contribuir algo, no para obtener algo.

Hay muy poco que el mundo pueda hacer por ti, pero hay mucho que tú puedes hacer por el mundo. La única manera en que puedes abrazar esta verdad espiritual es tener un profundo sentido de tu origen y tu destino, y esto no puede apreciarse solo filosóficamente o teológicamente. Debe nacer de una experiencia profunda dentro de ti mismo.

Así que la primera verdad espiritual es que aquí no existe una verdad absoluta. No formules una verdad absoluta, o te esclavizarás y si la enseñas, también esclavizarás a otros.

La siguiente verdad espiritual es que Dios ya ha establecido un Plan, y no puedes cambiarlo. Así que ya hay un Plan en marcha. No solo no puedes cambiarlo, ni siquiera puedes entenderlo. Para entender el Plan de Dios, tendrías que tener la mente de Dios, que en este momento no tienes. Es como los niños pequeños intentando entender por qué sus padres se van todos los días al trabajo. No lo entiendes. No has alcanzado ese nivel de participación. Una realidad relativa no puede apreciar una realidad absoluta, aunque la realidad relativa se está moviendo hacia lo absoluto. Tú estás avanzando hacia lo absoluto.

A las personas a menudo les gusta decir: “Bueno, estaré creciendo y desarrollándome por siempre”. Pero cuanto más crezcan y se desarrollen sinceramente, y no solo en la fantasía, más verán lo difícil y exigente que es, y hacia el final del crecimiento y el desarrollo, estarán muy cansadas de ello. Ahora solo querrán volver a su Hogar. La gran aventura ha terminado. Pero esto no es una renuncia, sino el resurgimiento de tu verdadera realidad dentro de ti mismo. Así que, a mitad del viaje ya estás a medio camino de tu Hogar, y cuanto más estés en el Hogar, más querrás arrastrar al resto de ti al Hogar contigo. Y cuanto más estés en el Hogar, más querrás arrastrar a todos contigo. Esta es una atracción natural. No es una filosofía ni una idea sagrada. Cada pequeño incremento del Conocimiento que recuperes, querrás extenderlo a otros de manera natural. Eso es todo lo que puedes hacer con él.

La contradicción de vivir en este mundo es que es un escondite. Las personas tienen miedo de dar y miedo de recibir, porque cuando comienzas a dar y recibir, la idea de ocultarse comienza a disolverse, y te das cuenta de que Dios ya te ha atrapado.

Para tu verdadera Mente, esta es la gran reunión. A tu lado personal, le parece la muerte. El lado personal de tu mente es algo que has adquirido estando aquí. No sabe de Dios. Tienes que enseñarle sobre Dios como a un niño pequeño, para asegurarle que todo irá bien. No lo combatas ni lo castigues como a un niño malo. No lo insultes por ser estúpido. Teme por su propia supervivencia.

Por eso, Dios ya ha creado un Plan. O estás con él o no lo estás. Es posible no estar con él. Realmente no puedes estar fuera de él, pero puedes estar ocioso dentro de él, no participar. Es como un gran baile. Vienen muchas personas, pero solo bailan unas pocas. Todas las demás están paradas sin saber qué hacer. Es una situación muy infeliz.

Tus ideas sobre el Plan de Dios siempre se quedarán cortas porque la realidad es demasiado grande y demasiado inclusiva. Incluye a todos. Dios es muy inteligente. Dios toma todo lo que has hecho y cada realidad que has imaginado y lo pone todo en movimiento con una gran atracción por volver a tu Hogar.

Dentro de tu propio Conocimiento, tienes esta atracción. Es la gran atracción del Creador hacia lo Creado. Si te mueves con ella, demostrarás extraordinario poder y gracia en este mundo, no porque seas una persona especial, sino simplemente porque tu Conocimiento ha tenido la oportunidad de brillar. Todavía tendrás un lado personal y una vida personal, pero habrá gracia contigo porque la gracia está siendo liberada. Tu tesoro ahora está comenzando a mostrarse.

Vayamos a otra verdad espiritual. Vamos a dar la verdad sobre las relaciones. Hay dos tipos de relaciones que están disponibles para ti con algún otro. Reflejan los dos aspectos de la mente que posees. Hay relaciones para desaprender, y hay relaciones para el verdadero logro.

Las relaciones para desaprender son aquellas donde te unes con otro para cometer errores mutuamente y aprender de ellos. Naturalmente violan tu Conocimiento pues ese es el error. Las buscas porque te estimulan. Tu propósito en ellas, por lo general, es hacer tu escondite más placentero y darte un sentido de propósito, dirección, participación y relación, que es naturalmente deficiente en un estado de ocultamiento, porque ocultarse es muy solitario. Y así, estas relaciones, que son las relaciones predominantes en este mundo, son para desaprender y deshacer. Son decepcionantes, pero son muy, muy iluminadoras pues te enseñan sabiduría y te enseñan a valorar lo que sabes.

El otro tipo de relación es para las personas que saben que van a algún lugar, y que se unen para ir juntas a algún lugar. Se unen porque sienten la Presencia y porque sus vidas son verdaderamente compatibles. Estas relaciones son raras, pero están disponibles para todos. Son para el verdadero aprendizaje y no para desaprender. Desaprender elimina las cosas. El aprendizaje real agrega cosas. Estas relaciones son para agregar, pero no solo las cosas de este mundo. Son para cultivar el Conocimiento y para hacer surgir cosas que tienen un resultado permanente. No son solo entre un hombre y una mujer, y no son exclusivas del marido y la mujer. Su máxima expresión es la devoción, porque la devoción emana del Conocimiento, si es verdadera. La devoción no se basa en la preferencia personal o el apego. Es algo que emana naturalmente. No tienes que intentar ser devoto. Lo eres o no lo eres.

Ya que Dios te está llamando a ir a algún lugar, al que irás de todos modos, cuanto más sientas que vas a algún lugar, más criterios reales tienes para una relación, porque una relación es para participar.

Todo el mundo debe pasar por el desaprendizaje en la relación, pero si este desaprendizaje continúa en la edad adulta, limita tu oportunidad de experimentar un verdadero enlace.

Renunciarás a tan poco para ganar tanto. No tienes que ser célibe, ni vivir en un monasterio, pero necesitarás renunciar a muchas de tus ideas, porque son inapropiadas para una verdadera asociación. Hay cierta tristeza en renunciar a las ideas, pero las ideas son muy limitadas y mínimas en comparación con la vida misma.

Esto nos lleva a la siguiente verdad espiritual. Solo hay tres cosas en la vida en este mundo: Hay pensamientos, hay imágenes y hay Presencia. Pensamientos, imágenes y Presencia. Eso es todo.

A medida que aprendas a observarte a ti mismo, comenzarás a ver que estás experimentando principalmente tus pensamientos, y estás valorando principalmente tus imágenes. La autoobservación hace esto más evidente, porque ves que estás reaccionando a algo que ni siquiera está ahí. Cuanto más aprendas a experimentar y seguir al Conocimiento en la vida, más valoras la experiencia de la Presencia, porque la Presencia te enseña lo que realmente está ahí. Tus pensamientos sobre ello y tus imágenes de ello, son secundarios.

Por ejemplo, tal vez encuentres a alguien que te atrae y decides: “¡Oh! No me he sentido así en mucho tiempo. Estaré con esta persona. ¡Se siente tan maravilloso!”. Tienes pensamientos y tienes imágenes, y son pensamientos e imágenes maravillosos. Estás con esa persona, y excita tus pensamientos e imágenes. Luego, en algún momento posterior, averiguas quién es la otra persona, y es decepcionante. No es tan glamorosa como en tus pensamientos e imágenes. Estabas enamorado de tus pensamientos e imágenes y descubriste a la persona más tarde.

Pero cuando estás con el Conocimiento, primero descubres a la persona. Los pensamientos e imágenes que se adquieren, se basan en la experiencia de esa persona —su presencia, su ser y su mente—. Tu relación se basa en si van en la misma dirección y si pueden ir juntos. Esto es sabiduría en la relación. No puedes enamorarte de alguien y esperar ir juntos en la misma dirección. Si estáis yendo en direcciones opuestas, entonces así será. Todavía puedes amarla intensamente pues amas su presencia, pero debes dejarla libre para participar en la vida. La verás más tarde. Recuerda, esto aquí es solo una visita temporal. Cuando estés de vuelta en el otro lado, puedes recordar.

Así que lo que experimentas en este mundo son pensamientos, imágenes y Presencia. No hay nada malo en los pensamientos e imágenes, excepto que dominan la experiencia de las personas. Tendrás pensamientos porque tienes una mente, y tendrás imágenes porque tienes sentidos, así que no puedes eliminarlos y estar en el mundo. Pero si predominan, entonces no sentirás ninguna presencia. No sentirás tu propia presencia, la presencia de otro, la presencia de la vida o el movimiento de la vida. No estarás presente para nada. Estarás completamente absorto en tu propio proceso interno. Por eso, el objetivo de tus verdaderos Maestros es sacarte de ese ensimismamiento y reinvolucrarte significativamente en la vida. No hay nada más que expectativa y decepción, al estar involucrado con tus pensamientos todo el tiempo.

La vida está yendo a algún lado. No dejes que se vaya sin ti. La Presencia siempre te moverá porque va a alguna parte. No son imágenes fantásticas, estás experimentando la presencia de otro. Estás experimentando la realidad de alguien más directamente, no solo intelectualmente. Entonces puedes mirar y ver si la persona que te atrae tan fuertemente va a donde tú vas, porque tienes tu propio sentido de ir a algún lugar.

La mayoría de las personas no tienen la sensación de ir a ninguna parte, y esperan que su romance proporcione alguna dirección. Y así hay dos personas que no van a ninguna parte esperando que el otro guíe el camino, esperando que las circunstancias las obliguen a ir a alguna parte. “Bueno, si tenemos muchos hijos, eso requerirá que hagamos algo”. Eso es válido. Pero para ti que has mostrado interés en el Conocimiento, no será suficiente que tus circunstancias dicten completamente tu movimiento en la vida.

Vayamos a la siguiente verdad espiritual. No estás solo en tus esfuerzos por cultivar el Conocimiento. Los miembros de tu Familia Espiritual, que están inherentemente relacionados contigo, están asistiéndote, tanto desde fuera de tu rango visible como dentro del mismo mundo. Por eso, no pienses que tienes que confiar solo en tus propios esfuerzos para alcanzar la grandeza, que de hecho es solo naturalidad.

Así que tienes Maestros y tienes asistencia. Si quieres estar a solas con tus pensamientos, eres libre de hacerlo porque puedes hacerlo en un escondite. Tu mente es tu único escondite. Incluso este mundo físico, por difícil que sea, no es realmente un escondite. Así que el único lugar en el que puedes esconderte es en tus pensamientos. Si tus pensamientos comienzan a abrirse y a despejarse un poco, verás que muchas personas te miran, muy amorosamente. Es tu Familia Espiritual. Es la experiencia directa de ´las relaciones. Es la vida.

El único lugar en el que puedes esconderte está en tus pensamientos. Puedes pensar desde el momento en que despiertas hasta el momento en que te duermes, y nunca estarás fuera de tus pensamientos. Así que parece que estás completamente solo en tus pensamientos. Es solo cuando algo dramático te sucede y te saca un poco de tus pensamientos, que tienes un momento para experimentarte en la vida.

Tus Maestros Internos están contigo, aunque quizás nunca les conozcas en esta vida. Solo si se te da una llamada y respondes, su Presencia se hará más fuerte pues necesitarás saber que su ayuda está contigo de una forma muy demostrativa.

Muchas personas no aceptarán ayuda, por lo que deben recibir los regalos sin saber de dónde provienen. Sus esfuerzos, si están verdaderamente motivados, les llevarán de todos modos a una verdadera relación. Comprenderán que lo que han hecho es el producto de una relación y no el producto de un individuo, porque los individuos no logran nada.

No hay creatividad individual en el universo. La creatividad es un subproducto natural de la relación, ya sea que veas la relación o no. La expresión “individuo creativo” es contradictoria en la terminología. Solo hay relaciones creativas. En algún lugar, alguien se ha conectado con algo más que es real, inherente y genuino, y esto produce una contribución notable. Eso es la creatividad, y es muy emocionante porque los individuos involucrados se dan cuenta que son parte de algo más grande que está trabajando a través de ellos.

El verdadero matrimonio es creativo. La verdadera amistad es creativa. La verdadera religión es creativa. El verdadero trabajo en el mundo es creativo. ¿Por qué? Porque cada uno te une con algo que produce algo más grande de lo que podrías producir solo.

Ahora bien, como se ha dicho, el miedo fundamental en todas las personas es el temor a Dios, el temor de que Dios los alcance y castigue. Así que subliminalmente, Dios es como el diablo que te castigará y te perseguirá por ser tan estúpido. También existe la creencia de que cuando Dios aparezca, tendrás que renunciar a todo lo que es divertido y disfrutas en el mundo. Esto representa otra forma de persecución, porque Dios te quitará todo y hará de ti una especie de clérigo infeliz. Esto es muy ridículo, por supuesto, pero es el núcleo del pensamiento de la mayoría de las personas. Por eso las personas aceptan ideas absolutas, pero no a Dios.

El servicio de Dios está en todas partes. Se mueve a través de muchos canales. ¿Por qué hace esto? Porque es una fuerza de atracción natural. Es como la gravedad. Encuentra su camino a través de todo. Reorganizará la realidad física para acomodarla, no porque se entrometa, sino simplemente porque es una fuerza natural que atrae.

¿Qué son las Familias Espirituales sino grupos de individuos que se han unido a partir de esa atracción y que, en un estado superior de la realidad, se unirán a otros grupos grandes? Al igual que los ríos que se unen en su camino hacia el mar, hay una mayor asociación basada en la atracción natural, que a niveles espirituales más altos se vuelve cada vez más poderosa.

Aquí cada vez más te conviertes en la fuerza de contribución que realmente eres, porque no hay nada más que hacer. Estás siendo reclamado lentamente, pero mientras está siendo reclamado, también estás contribuyendo a todos y a todo, y esto te devuelve tu propio valor a ti mismo. No puedes volver a Dios si eres un estúpido idiota. Estarías demasiado avergonzado. No tendrías capacidad para la relación. Así que en todas las etapas de tu reclamación, contribuyes con regalos de valor, y esto redime tu valor.

Debes volver a Dios como parte de la Creación, no como una persona miserable. Dios no sabe de personas miserables. Dios no creó personas miserables, pero a pesar de todo, Dios atraerá a la persona miserable, pues Dios está en todas partes, y la atracción hacia Dios está en todas partes. No puede evitarse por siempre.

La siguiente verdad espiritual es que el plan de estudios que se da a nivel individual es bastante específico. Muchas personas necesitan una vida muy reglamentada con una tremenda autodisciplina y estructura para lograr cualquier cosa, reunir sus recursos internamente y organizar su pensamiento y sus asuntos. Otras personas necesitan renunciar a toda regimentación y confrontar el espacio, la nada y la apertura directamente.

Todos están en un escondite, pero Dios tiene la llave. Las diferentes llaves se ajustan a diferentes cerraduras. ¿Cómo puede Dios saber qué hacer por cada persona? Dios no tiene que resolver tu dilema. Dios simplemente te atrae y tu dilema se desmorona. Ese es el prodigio. Así es como funciona la vida. Dios no necesita resolver todas las complejidades de tu problema y todas las cuestiones de tu vida.

Tus Maestros Internos no se quedan despiertos por las noches pensando en cómo te rescatarán del próximo error que estás a punto de cometer. Ellos están simplemente con la atracción. Amplifican la atracción y la expresan. Eso deshará todos tus errores. Dios está atrayéndote al Hogar. Incluso la abrumadora amenaza de este mundo y todas sus atracciones, miedos e inducciones que parecen dominar cada momento de tu vida, no son nada comparados con la atracción de Dios.